Ernesto Puga

Ernesto Puga, beloved son, devoted father, and cherished brother, left this world too soon on April 5, 2025, in Salt Lake City, Utah, after a tragic incident. Born on December 12, 1989, in Porterville, California, Ernesto lived a life filled with purpose, love, and quiet strength.

Ernesto was smart, resourceful, and endlessly selfless. He did everything for others, never wasting a second of his day. Though quiet by nature, his actions spoke volumes—always showing up for the people he loved and doing everything with passion and care. He carried an immense love for cars, spending countless hours learning, working, and helping others learn the trade. From weekend car shows to moments under the hood, he turned his passion into a meaningful part of his life and legacy.

While his natural talent and keen eye for cars shined brightly, Ernesto’s greatest joy was his children, Marianah (10) and Maurizio (17). Always placing their needs and dreams above all else, he always showered them with love and time. Their favorite memories — nurturing drives, weekends at car shows, and learning how to fix cars together — reflect the deep bond they shared. Ernesto made them feel safe, cherished, and completely understood.

He found happiness in life’s simple but meaningful moments — the peace of mountain trails, the thrill of a good hike, and the joy of time spent with family. He was an amazing father, a loving brother who was always looked up to, a devoted son who shared a special bond fixing cars with his dad, and a loyal friend whose presence brought comfort and love to those lucky enough to be around him.

Ernesto is survived by his children, Maurizio and Marianah; the mothers of his children, Daisy and Vanessa; his parents, Susana and Francisco; and his siblings: Junior, Fernando, Raul, and Angel. He is also survived by four nieces, three nephews, and many extended family members who will forever carry his memory in their hearts.

A viewing service will be held at City View Memorial in Salt Lake City on April 10, 2025 at 6pm-8pm, offering an opportunity for loved ones to come together and celebrate Ernesto’s life. In his honor, his family and friends will spread his ashes in the mountains — a place where he found peace, clarity, and the serenity he so deeply cherished.

Ernesto Puga, hijo amado, padre devoto y hermano querido, partió prematuramente de este mundo el 5 de abril de 2025 en Salt Lake City, Utah, tras un trágico incidente. Nacido el 12 de diciembre de 1989 en Porterville, California, Ernesto vivió una vida llena de propósito, amor y una fuerza serena.

Ernesto era inteligente, ingenioso y sumamente desinteresado. Lo hacía todo por los demás, sin desperdiciar ni un segundo de su día. Aunque tranquilo por naturaleza, sus acciones decían mucho: siempre estaba presente para quienes amaba y hacía todo con pasión y esmero. Sentía un inmenso amor por los autos, y dedicaba incontables horas a aprender, trabajar y ayudar a otros a aprender el oficio. Desde exhibiciones de autos los fines de semana hasta momentos bajo el capó, convirtió su pasión en una parte significativa de su vida y su legado.

Si bien su talento natural y su buen ojo para los autos brillaban con luz propia, la mayor alegría de Ernesto eran sus hijos, Marianah (10) y Maurizio (17). Siempre priorizando sus necesidades y sueños por encima de todo, los colmó de amor y tiempo. Sus recuerdos favoritos —viajes en coche, fines de semana en exposiciones de autos y aprendiendo a reparar coches juntos— reflejan el profundo vínculo que compartían. Ernesto los hacía sentir seguros, queridos y completamente comprendidos.

Encontraba la felicidad en los momentos sencillos pero significativos de la vida: la paz de los senderos de montaña, la emoción de una buena caminata y la alegría de pasar tiempo con la familia. Era un padre increíble, un hermano cariñoso al que siempre admiraban, un hijo devoto que compartía un vínculo especial arreglando coches con su padre, y un amigo leal cuya presencia brindaba consuelo y amor a quienes tenían la suerte de estar a su lado.

A Ernesto le sobreviven sus hijos, Maurizio y Marianah; las madres de sus hijos, Daisy y Vanessa; sus padres, Susana y Francisco; y sus hermanos: Junior, Fernando, Raúl y Ángel. También le sobreviven cuatro sobrinas, tres sobrinos y numerosos familiares que siempre llevarán su recuerdo en el corazón.

El velorio se celebrará en el City View Memorial de Salt Lake City el 10 de abril de 2025 a las 6pm-8pm, ofreciendo a sus seres queridos la oportunidad de reunirse y celebrar la vida de Ernesto. En su honor, su familia y amigos esparcirán sus cenizas en las montañas, un lugar donde encontró paz, claridad y la serenidad que tanto apreciaba.